Los tres integrantes de Leadgate -la gerenciadora de Pluna- deberán responder ante la magistrada Adriana de los Santos y el fiscal Juan Gómez. El caso Pluna sigue adelante a nivel judicial y hoy declarará el exCEO de la empresa Leadgate, Matías Campiani. También serán indagados Arturo Álvarez Demalde y Sebastián Hirsch, socios de Campiani en Leadgate, informa hoy El País. La jueza de Crimen Organizado, Adriana de los Santos y el fiscal Juan Gómez recibirán a los tres ejecutivos en calidad de indagados. A instancias de una denuncia del Partido Nacional, Campiani enfrenta una serie de acusaciones sobre irregularidades en el desarrollo de su gestión como gerenciador de Pluna entre 2007 y 2012. Su abogado es el penalista Jorge Barrera. Hace unos dìas Campiani advirtió en entrevista con El País que todos los ejercicios de la asociación Leadgate - Pluna fueron aprobados por el gobierno uruguayo. La justicia intenta conocer los detalles de la compra de los aviones a Bombardier -propiedad de Scotiabank, uno de sus principales acreedores- y otras operaciones que están bajo sospecha. El legislador blanco Carlos Moreira, que investiga la gestión, aseguró que existen actos de corrupción en torno al cierre de la aerolínea y dijo que la clausula de indemnidad civil firmada entre el gobierno y Campiani es una “suerte de pacto de silencio”. Los otros dos jerarcas de Leadgate tuvieron participaciones protagónicas en el cierre. Hirsch conoció a Campiani en un asado en Alemania unos años atrás. Es un especialista en banca corporativa que tuvo una decisiva actuación en la liquidación de la aerolínea. Antes de Pluna, estuvo en Citi Bank Argentina y en Goldman Sachs de Nueva York. También gerenció las operaciones de la multinacional Procter & Gamble, y trabajó en Europa para la financiera McKinsey and Co. Álvarez Demalde también se ha desempeñado en cargos ejecutivos en corporaciones como Riverwood Capital con sede en Nueva York. Los tres ejecutivos deberán responder sobre los detalles de la operación que terminó con el cierre de la aerolínea de bandera uruguaya. A mediados de junio de 2012, las acciones de la empresa fueron devueltas a Pluna 14 días antes que el gobierno decidiera el cierre de la aerolínea. El pasivo fue estimado en 301 millones de dólares, en tanto que el activo alcanzó los 290 millones, según información oficial. |